Debo conseguir ese dinero de alguna forma.
Mi lista en orden de prioridades:
- Hacer horas extras en mi trabajo
- Pedir dinero prestado a Manuel
- Buscar otro trabajo
- Pedir dinero a mis padres
- Robar un banco
- Vender drogas con los paisa
- Aceptar el trabajo que me ofreció la perra de Dolores
(de ahora en mas voy a recordar que no soy un gran humorista)*
La primer opción de todas no es la mas seductora pero, si la más viable. Sería preferible robar un banco o vender drogas, pero, estas opciones, si bien tendrían una recompensa mucho mas apetitosa, requieren de un espíritu del cual carezco. Pedir dinero a Manuel o a mis padres se convirtió en una salida fácil y rápida pero, no estoy dispuesto a afrontar las consecuencias. Aceptar el trabajo que me ofreció Dolores nunca va pasar, simplemente lo puse en la lista para recordar que nuca va a pasar y sentirme orgulloso de eso.
Estoy feliz. No tan en el aire con esto de conseguir el dinero para viajar a PerúSon las 11:oo de la noche en Buenos Aires y tengo que ir a visitar a Manuel. El viaje es bastante largo. En estos últimos meses descubrí que cada día que pasa voy perdiendo esa inconsciencia que servía como inmunidad contra lo que me acecha. Cada día que pasa tengo más miedo de salir a la calle, me da vergüenza decirlo, sobre todo por que soy de uno de los barrios mas peligrosos del Perú y esto que pasa aquí es un juego de niños.
Nota: Debo recuperar ese mecanismo de defensa.*
____________________________________
* Estas notas no formaban parte de la novela. Estaban escritan en dos post-its pegados al comienzo de la obra. Parecen formar parte del argumento pero son expreisones del escritor no del narrador. Manuel Jontes
1 comentario:
Hola, llegue de casualidad a blog y no pude evitar leer tu post anterior, asumo que fue un muerto por el terremoto o no?
Publicar un comentario